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Linux nunca ha sido más popular. Los sistemas operativos gratuitos basados en el kernel y las aplicaciones de código abierto son una excelente manera de tomar el control de su PC o de dar nueva vida al hardware antiguo.
Hemos tomado todas las distribuciones principales para una prueba de manejo, así que sigue leyendo para descubrir nuestras favoritas y ver cuál es la adecuada para ti.
Ubuntu 13.04
Ubuntu, el sabor más conocido de Linux, está diseñado para que los principiantes lo utilicen fácilmente. Es fácil de instalar, viene con un conjunto completo de aplicaciones y usa la interfaz distintiva de Unity, que coloca sus aplicaciones justo al lado de la pantalla.
Se lanza una nueva versión de Ubuntu cada seis meses, y cada dos años el desarrollador lanza una edición de soporte a largo plazo (LTS), que recibe soporte y actualizaciones gratuitas durante cinco años. Entonces, ya sea que sea un modista que quiera mantenerse a la vanguardia o una empresa que busque estabilidad a largo plazo, vale la pena echarle un vistazo a Ubuntu.
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Linux Mint 15
El código subyacente de Linux Mint se basa en Ubuntu, por lo que admite la misma amplia gama de aplicaciones y dispositivos. Y viene con más aplicaciones y componentes preinstalados: la idea es crear un sistema operativo Linux que sea completamente utilizable desde el primer momento.
La diferencia clave entre Mint y Ubuntu es la interfaz. Mint le ofrece la opción de dos administradores de escritorio, pero cualquiera que elija, la experiencia está mucho más cerca de Windows y de otras distribuciones de Linux que el lanzador de Unity. Eso lo convierte en una opción atractiva si no te gusta el escritorio de Ubuntu.
Mint también se diferencia de Ubuntu en que no anima a los usuarios a actualizar con regularidad, por lo que es mejor para aquellos a quienes les gusta mantener las cosas estables.
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Fedora
Fedora usa una peculiar interfaz de escritorio que enfatiza el espacio abierto. El lanzador de aplicaciones y la interfaz de búsqueda están ocultos de forma predeterminada y solo aparecen cuando mueve el mouse a la esquina de la pantalla o hace clic en un ícono discreto. Tiene un aspecto impecable y le ayuda a concentrarse en su trabajo.
El paquete de software incluido no es el más generoso que hemos visto, pero es fácil instalar las aplicaciones que necesita. En general, Fedora es una distribución accesible para aquellos a quienes les gusta mantener las cosas al mínimo.
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openSUSE
openSUSE, como Linux Mint, ofrece una opción de dos interfaces de escritorio, en este caso, los escritorios clásicos de KDE y Gnome. También viene con el programa distintivo YaST (otra herramienta de configuración más), que ofrece amplias opciones de configuración para todo el sistema. Otro buen detalle es la disponibilidad de colecciones de software temáticas, por lo que puede instalar varios programas que funcionan juntos con un solo clic.
openSUSE es una distribución de Linux estable y flexible que se adaptará a usuarios un poco más técnicos que se sientan cómodos configurando su propio hardware y software.
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